Como buena Mujer Pulpo que soy, mi inquietud por diferentes temas me llevó a unirme a la Asociación Red de Amigos Solidarios de El Escorial, porque ocho tentáculos dan para mucho… y echar una mano a los demás es un tentáculo de lo más gratificante; por ejemplo, ayudando a organizar una gala solidaria.
Esta vez, nos hemos unido a la Asociación Aulencia, cuyo fin es apostar por la integración en la sociedad de las personas con diversidad funcional, que tras la mayoría de edad quedan fuera del sistema educativo, para así dotarles de las habilidades sociales necesarias para un desarrollo pleno, personal y social. Es decir, una labor maravillosa.
Se trata de una Asociación que, aunque la tengo cerca, era desconocida para mí, pero me atrapó por completo.
La gala benéfica de la que te estoy escribiendo hoy tuvo lugar hace unos días. Era sábado, por la tarde. ¡Un buen plan de fin de semana! Fue de lo más familiar y entrañable; y en ella cada uno de los voluntarios/as, cantantes mayores y pequeños, bailarinas, payasos, organizadores, el Ayuntamiento de El Escorial (que nos cedió el espacio), pusimos nuestro tiempo y empeño para hacer que el evento fuese un éxito.
Y creo que… ¡lo logramos!
Seguro que cerca de ti hay muchos planes parecidos que puedes aprovechar para pasar una buena tarde y de paso ayudar a alguien que lo necesita. Me ha sorprendido darme cuenta que son infinidad las personas que se asocian con un fin común para ayudar a los demás de forma altruista, desinteresada. (Mira a tu alrededor)
Hay grandes galas, las que ves en la tele, con infinidad de medios y profesionales que ponen su nombre al servicio de diferentes propuestas de ayuda…
Y hay galas sencillas, en nuestros pueblos, barrios, de personas con pocos medios y mucha buena voluntad… a las que es un placer asistir y colaborar con nuestra presencia y con el pago de una entrada que redundará en la mejora de las condiciones de alguien.
En este segundo tipo de eventos, un pequeño voluntario con una gran afición se convierte en una estrella que hace vibrar a los que van a escucharle.
Si tengo que elegir alguno, en esta ocasión me quedaría con el momento final, el cierre de la gala. Un broche final con una energía positiva que recorrió todo el recinto y envolvió a cada una de las personas que allí nos encontrábamos, cantando juntos, el tema de Diego Torres «Color esperanza«. El color que te hace ver que al final, lo que nos mueve, lo que nos motiva, lo que nos inspira e impulsa, son las cosas buenas de la vida.
«Saber que se puede, creer que se puede,
quitarse los miedos, sacarlos afuera.
Pintarse la cara color esperanza,
tentar al futuro con el corazón…»
(Canción «Color Esperanza«)
Autora: Isabel P. Ruiz de Alegría
Mabel Romero
Genial Isabel para mi desde la red amigos Solidarios fue un honor contar contigo y con los demás para ayudar a otros,unió corazones y la alegría de compartir entre todos el apoyo a la inclusión social y haya más tentáculos merece la pena un beso para vosotras y para todos los que estuvieron en la gala de una forma u otra .GRACIAS!!