Era una noche de verano.
Calurosa, pero no demasiado.
Mes de julio. Madrid, España.
Y el plan era ir al cine. A priori, ver una película en pantalla grande a mí me parece siempre un plan estupendo. Pero claro, hay películas… y «churros».
¡Y esta era de lo segundo!
Tengo que decir que al igual que me leo un libro hasta el final buscando «ese algo especial», lo mismo hago con las películas. Como el capitán del barco (menos el del Concordia) yo nunca abandono la sala hasta la última imagen que aparece en la pantalla. Y eso incluye los títulos de crédito, las sorpresas finales (que muchos se pierden por irse con prisa), la lista de las canciones que me han hecho vivir momentos estupendos durante dos horas, los nombres de los dobladores españoles…
Y esta vez lo he vuelto a hacer. Me mantuve firme y sentada en mi butaca, ojiplática, intentando digerir esa película imposible: «Mil maneras de morder el polvo«.
La venden como «comedia», pero a mí no me salió ni media sonrisa.
¡Una gran pérdida de actores para una gran porquería! Y en todos los sentidos. En el literal también. Hacía tiempo que no veía algo tan escatológico que supuestamente debe dar risa. Ja, Ja. ¡¡¡¡Me parto!!!!
Charlize Theron, muy guapa, como siempre. Me encanta esta mujer. Pero como actriz en otros filmes mucho mejor. Ya sé que es amiga del director, guionista, productor (Seth MacFarlane)…casi un hombre pulpo pero disfrazado de «Osito Ted»; pero esta vez, Charlize, te has equivocado.
Y el resto, Liam Neeson, Neil Patrick Harris, Amanda Seyfried… pues aún no sé cómo se han embarcado en semejante historia.
Lo único algo «curioso» es el guiño a la película «Regreso al futuro«, con Christopher Lloyd; o a Django Desencadenado en las escenas finales.
Lo demás, «algo con pretensión de ser comedia», que se queda solo en «algo con prentensión».
¡Con la de guiones buenos y con sustancia que hay esperando financiación!
Así que mi consejo de hoy es:
Al cine, SÍ, pero a ver otra película que no sea esta.
Autora: Irune GómezLa Mujer Pulpo